Descripción:

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El polen es un polvo formado por gránulos o pequeñas bolitas que recogen las abejas en sus patas y transportan de las plantas a la colmena para alimentar a la colonia. De tonos variables según el origen botánico, generalmente dominan los amarillos o anaranjados, pero pueden aparecer los tonos verdes, azules, blancos, negros, etc. Contiene proteínas (casi todos los aminoácidos esenciales), y es una gran fuente de vitaminas, minerales, hidratos de carbono y lípidos (incluyendo omega 3 y omega 6). Se puede consumir solo, o en maceración en líquidos fríos o tibios azucarados durante unos 10 minutos, y como ingrediente en la elaboración platos de cocina. Existen dos tipos de presentación: Polen seco: obtenido tras un proceso de secado a temperatura inferior a 45 ºC. Polen fresco: obtenido directamente de la colmena sin ningún tratamiento. El polen fresco se deshace en la boca. El cuerpo absorbe con más facilidad todas las proteínas, vitaminas y aminoácidos que contiene. Al no haberse secado, hay que conservarlo en frío, recomendamos congelarlo para que permanezca mucho tiempo en óptimas condiciones.

Formato

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225 g

Ingredientes

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Valores nutricionales

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kcal / azúcares